Cataluña: Una situación sin precedentes.

     
     El propósito de este artículo es estudiar el comportamiento del cuerpo electoral de Cataluña desde las primera elecciones democráticas al Parlament mediante la representación gráfica del histórico de los resultados. El criterio elegido es la posición de los partidos en el tema de la independencia.

Se entienden por “Separatistas”, los partidos que se declaran como tales en sus estatutos o en sus programas; JxCat, JxSI, CiU (por CDC) CUP y ERC. Se han tomado PSC, CSQEP, COMUNS, PP, Cs, IC como “No Separatistas”.

Los comentarios y conclusiones se limitan a lo que resulta evidente y a los hechos, evitando valoraciones y previsiones.

Estos gráficos puede servir a otras personas interesadas en el tema para un análisis más profundo o desde otros puntos de vista y para soportar estudios de prospectiva.

Los datos para la construcción de los gráficos se han tomado de la web de la Generalitat de Catalunya (Idescat): 
    

  Gráfico I

Comentarios gráfico I.

•    Si analizamos la evolución de la proporción de votos entre “Separatistas” (SEP) y “No Separatistas” (NSEP) vemos que es un gráfico bastante equilibrado. 

•    El gráfico presenta dos anomalías en los años 1980 y 1992 que son años políticamente excepcionales.

•    La línea de tendencia indica que SEP y NSEP están divididos en dos bloques casi al 50%. En el largo plazo hay una disminución paulatina de la proporción de votos favorable a los partidos separatistas.

Gráfico II

Comentarios gráfico II

Analizando el número de votos a cada uno de los bloques en las sucesivas elecciones podemos ver lo siguiente:

•  También en este gráfico la evolución de los dos bloques está  bastante
    equilibrada (con las anomalías indicadas). 

•  Las líneas de tendencia indican que cada vez vota más gente a ambos bloques. En 2017, casi en doble de electores que en 1980. Hay tres razones que lo pueden explicar.

o Aumento de participación.

o Aumento de población.

o Incremento de la proporción de habitantes mayores de edad (envejecimiento).

No es probable que este aumento de votantes continúe, al menos en las dos próximas elecciones, dado que las tres variables no aumentarán.

•  En el largo plazo (37 años) la diferencia de votos entre los dos bloques es muy pequeña, unos 30.000 votos, a pesar de los cambios que la sociedad ha ido experimentando, lo que no deja de ser sorprendente. Puntualmente hay variaciones de hasta 190.000 votos, dejando aparte las anomalías señaladas. 

Conclusiones

•    Los electores catalanes ante el tema de la independencia están divididos en dos bloques numéricamente muy parecidos en el largo plazo. Las diferencias en los resultados de cada bloque en las sucesivas elecciones pueden deberse al grado de motivación que han tenido los electores en cada momento.

•    De los gráficos se deduce que es MUY POCO probable que las convicciones de los electores de cada bloque cambien a medio plazo. En cambio es MUY posible que uno de los bloques alcance o supere el 51% en unas elecciones; de hecho ya ha ocurrido si en el cálculo no tenemos en cuenta los votos de las candidaturas que no obtuvieron representación. 

•    Como consecuencia de la división muy próxima al 50%, para que la sociedad catalana (y la española) consigan una cierta estabilidad y por ende prosperidad es imprescindible que, cualquiera que sea el bloque ganador de unas elecciones, se llegue a un consenso político para la formación de gobiernos de la Generalitat. Idealmente, gobiernos de coalición de partidos de ambos bloques. Con esta división, ninguno de los dos puede pretender que el otro no existe. 

•    Actualmente (marzo 2018) el bloque separatista se encuentra en una situación de “guerra de la independencia sin armas”, históricamente inédita, con el estado español. Por definición, una situación de guerra hace imposible cualquier solución política. Diálogo y negociación son imposibles, al no haber acuerdo entre los contendientes ni siquiera en el objeto del diálogo.

•    Este escenario de confrontación es incierto. No conozco referencias históricas. Creo que no las hay. 

•    Consecuencias de cualquier guerra son el odio y el empobrecimiento. No pinta bien.